jueves, 28 de julio de 2016

Insurgentes.

       Hace unos días volví a ver al mismo hombre entre el medio del rayado, sus botas desgastadas descubrían su decadencia hacia el mismo, su mirada baja al verme y su mano tendida en mi dirección. El cemento se ha desgastado, las sillas se las han llevado, ha caído la luna, hombre de las tres calles, es hora de caminar, el café resultó ser un lujo para el hombre, me pidió las gracias, aunque entre sus dientes habían llagas Ver más...